En sus parábolas, pronunciadas una aquí y una allá, Cristo va mostrando las características del Reino al que todos nosotros hemos sido invitados desde nuestro bautismo. Los hombres de su tiempo entendían sus parábolas, porque Cristo se las pidió prestadas a los profetas que ellos conocían, pero dándoles una profundidad y un alcance, que no soñaron ni los profetas mismos.
"Aquel día salió Jesús de casa y se sentó a la orilla del mar. Se reunió junto a él tal multitud que hubo de subir a sentarse en una barca, mientras toda la multitud permanecía en la orilla. Y se puso a hablarles muchas cosas en parábolas, diciendo: He aquí que salió el sembrador a sembrar. Y al echar la semilla, parte cayó junto al camino y vinieron los pájaros y se la comieron. Parte cayó en terreno rocoso, donde no había mucha tierra y brotó pronto por no ser hondo el suelo; pero al salir el sol, se agostó y se secó porque no tenía raíz. Otra parte cayó entre espinos; crecieron los espinos y la sofocaron. Otra, en cambio, cayó en buena tierra y dio fruto, una parte el ciento, otra el sesenta y otra el treinta. El que tenga oídos, que oiga"
Jesús se llama a si mismo sembrador, las semillas son sus palabras y las distintas tierra donde caen las semillas son las personas que escuchan sus palabras.
En el primer caso la semilla cae en el duro suelo y se la comen los pájaros, esto se basa en las personas superficiales que solo se preocupan de ellos mismos, ya que son tan duros como el camino que simplemente se deja pisar sin hacer nada, por lo que las palabras de Jesús no hacen mella en ellos.
En el segundo caso la semilla cae entre las rocas donde casi o hay tierra y la semilla crece pero cuando sale el sol se seca, aquí te habla de las personas que escuchan las palabras de Jesús y deciden seguir su ejemplo y construir el reino de dios pero cuando hay dificultades lo dejan, ya que las palabras no han echado raíces en ellos.
En el tercer caso al semilla cae en espinos y aunque la semilla intenta crecer llega un momento en el que los espinos al ser mas abundantes y grandes les quitan los nutrientes y las semillas mueren, aquí habla sobre las personas que escuchan las palabras de Jesús he intentan hacer el reino de dios siguiendo las enseñanzas de Jesús, pero que cuando se ven solos deciden dejarlo y hacer lo que hace la mayoría.
En el cuarto caso la semilla cae en tierra fértil y da fruto, una parte el ciento, otra el sesenta y otra el treinta. Aquí habla sobre la gente a al que el llegan las palabras de Jesús y decide unirse para hacer el reino de dios auque sea un trabajo duro y complicado.
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